martes, 17 de abril de 2012

Piratas de Silicon Valley: Steve Jobs. Un Genio tirano y benevolente

Steve Jobs creó Apple en el garaje de su casa y sus dotes comerciales hicieron que, lo que aparentaba una obra de arte abstracta e inútil, se convirtiera en necesaria y, lo más importante, vendible.
Aunque últimamente no se escuchen más que palabras amables a Jobs lo llamaban ‘El tirano benevolente’ y no por nada. En el film Piratas de Sillicon Valley que narra parte de su vida, se observa esa explotación exagerada del empleado. Simplemente la punta del iceberg de una realidad muchísimo más grave detrás de su verdadera personalidad maquiavélica.
Despreciaba a Bill Gates, no solo por robarle sus ideas y productos, sinó por su preocupación por los trabajadores. Jobs coaccionó a sus empleados (de empresas deslocalizadas que trabajaban para Apple) para firmar un contrato de no-denuncia a la empresa en caso de resultar heridos o en caso de suicidios (hasta la fecha y bajo su tutela, se contabilizan 9).
Defensor de que “el fin justifica los medios” cuyo fin era el poder y el dinero. Se habla de su espiritualidad, pero viendo su biografía todo resulta paradójico y poco consecuente. El odio desmesurad que le genera Bill Gates o IBM nos habla de una personalidad que más que espiritual está llena de ira y que su ‘fin’ está muy alejado de motivos místicos y profundos. En el caso de su hija, Lisa a quién no admite como tal –al menos durante el periodo en que se cuenta la historia- demuestra su falta de empatía. Es curioso que nombre Lisa a uno de sus primeros computadores, siendo entonces claro quién es para él su verdadero “hijo”.
Visita Xerox en 1979 y al atisbar el futuro “toma prestados” (roba) sus avances tecnológicos - interfaces gráficas, el ratón, etcétera- Lo que daría sus frutos cinco años después al lanzar Macintosh.
Jobs quería marcar la diferencia, tal fue así que en 1984 contrata a Ridley Scott para dirigir un comercial que cambió la historia de la publicidad agresiva. Lanzamiento de Mac y acoso alevoso a IBM. Comparándolo con el gran hermano del 1984 de George Orwell (año de lanzamiento del Macintosh).
La contratación del director de Pepsi-cola John Sculley como un verdadero empresario que lo supervise, nos muestra la genialidad de Jobs sobre su propio ego desmedido (reconoce que necesita que le paren los pies) y se los pararon en 1985, un año después de lanzar Mac, cuando Sculley reconoce que el origen de todos los problemas de Apple eran del “niño rebelde” y lo despide de su propia empresa.
¿Hay vida fuera de Apple?
Mantuvo acciones de Apple, aún estando fuera de la empresa –valoradas en millones de dólares-
1986 es el año clave. Al salir de Apple, compró The Graphics Group (luego conocida como Pixar) subsidiara de Lucasfilms. Veinte años después, Disney anuncia la compra de Pixar convirtiendo a Jobs en en mayor accionista de Walt Disney Inc.
A su vez, en ese mismo año clave, funda NeXT Computer, considerada como fracaso empresarial, pero cuyo sistema operativo es vendido a Apple, propiciando así el retorno de Jobs a la ‘manzana mordida’ en diciembre de 1996. Luego de un pequeño golpe de estado Jobs vuelve a ocupar el puesto de consejero delegado.
Defunción
En 2011 renuncia a ese puesto por un cáncer de páncreas que le fue diagnosticado en 2003. Siguiendo su estela hippie fue consecuente con su pasado espiritual y se negó a seguir las indicaciones de la ciencia médica durante 9 meses haciendo solamente uso de una medicina alternativa (se afirma incluso que visitó a una vidente).
Según su biógrafo Walter Isaacson


“durante nueve meses se negó a someterse a cirugía para el cáncer de páncreas – un decisión que lamentó más adelante cuando su salud empeoró.”
Steve Jobs muere, a la edad de 56 años a causa de la metástasis producida por el cáncer, el 5 de octubre de 2011.
Durante las dos semanas siguientes a su fallecimiento en la web de Apple aparecía una nota necrológica que decía:
‘Apple ha perdido un genio creativo y visionario, y el mundo ha perdido un ser humano maravilloso. Aquellos que hemos tenido la fortuna de conocer y trabajar con Steve hemos perdido un amigo y un mentor que nos inspiraba. Steve deja atrás una compañía que sólo él podría haber levantado, y su espíritu siempre estará en los cimientos de Apple.’




14 comentarios:

  1. La palabra "genio" se utiliza mucho para describir a Steve. Los genios suelen estar asociados con una inteligencia por encima del promedio y una capacidad visionaria incomprensible. Su convulso mundo interior no impidió que el genio saliera a ofrecernos lo mejor de sí. Muy por el contrario, pareció encontrar en su pasión, una forma de liberación espiritual que en este caso fue creativa e inspiradora para otros.

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  2. Quería saber si vosotros también compartís que Jobs no fue "la madre Teresa" que nos venden. Genio sí, pero hasta dónde no nos afecta ese "convulso mundo interior" cuando esta gente tiene tantísimo poder sobre nuestro presente y futuro. Da un poco de miedo descubrir esta realidad sobre la gente que está muy arriba...desde luego, la única forma es pisando muchas cabezas y explotando a otros seres humanos. ¿De verdad no nos molesta?

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  3. Yo creo que hay que ver las cosas desde una doble perspectiva:

    -La primera, bajo el punto de vista de quienes lo consideran un genio y aceptan, amén de sus maneras, trabajar bajo su yugo. Yo creo que, cualquier trabajador, por mucho que necesite su empleo o por mucho que éste le guste, es libre de abandonarlo si las condiciones que se le presentan agreden contra su libertad de opinión y/o expresión.

    -Y la segunda, es el caso contrario. Aquéllos que consideran a este tipo un coaccionador nato; aquéllos que ven una vulneración total de los derechos humanos en hacer que sus trabajadores firmaran acuerdos de "no denuncia" contra agresiones explícitamente morales.

    Simpatizantes de una perspectiva u otra, lo que sí hay que reconocer es que en términos en los que Jobs trabajaba -tales como la revolución tecnológica que todas sus ideas supondrían- se puede considerar como "normal" su forma de pensar. El hombre que sabe que va a dar que hablar, que va a estar en boca de todos, puede ser un arma muy peligrosa.

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  4. Soy incapaz de elegir un bando u otro. Si Jobs era bueno o era malo. Mi visión de este hombre ha sido lo que he visto y oído, es decir, sus inventos como pueden ser el ordenador personal MAC o el iPhone, que son en mi opinión, grandísimos inventos, me hacen pensar de él como un genio. Su personalidad, viendo la película y leyendo esto, me deja mucho que desear... Se me juntan ideas contrapuestas: lo que se dice de él en la publicación o en la película; y lo que por ejemplo, se dice de él en su libro "Steve Jobs: La biografía" de Walter Isaacson, o en un famoso discurso que dio en la Universidad de Standford en 2005 (muy motivador y sincero, desde mi punto de vista).
    Yo creo que recordar a una persona por las cosas malas que ha hecho no es justo, aunque tampoco por las cosas buenas. En este caso, Steve Jobs, ha sido las dos cosas, y pese lo que nos pese, para conseguir las cosas de Apple que tenemos ahora, ha tenido o tuvo que hacer cosas buenas y malas. Como dice Gabriel, quien sabe que va a estar en boca de todos puede ser peligroso!

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  5. Es indiscutible ver a Jobs como un genio. Como alguien superior. Si compramos un Mac, un iPhone o un iPad, consideramos que son superiores al resto de competidores del mercado. Otra cosa, es como se haya conseguido esa superioridad. Que Steve Jobs explotaba a los trabajadores haciéndoles trabajar 90 horas a la semana y hacerles incluso camisetas, queda reflejado en la película. Su carácter respecto a la forma de comportarse con sus empleados es un claro reflejo de su ambición por ser el mejor. Una cosa no quita la otra, se puede ser un genio y a la vez una persona totalitarista y narcisista, como se le ha descrito en ocasiones.

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  7. Defensor de "el fin justifica los medios"cuyo fin era el poder y el dinero.
    No comparto del todo este argumento. Cierto que para Jobs el fin justificaba los medios pero no estoy de acuerdo en su fin fuera el poder y el dinero. Creo que más que poder o beneficios económicos, Steve buscaba su sueño, conseguir sus retos y ser el mejor, pero no parecía una persona obsesionada por el reporte económico, buscaba ser el número uno. Posiblemente su ambición fuese desmedida, pero a lo largo de la película se plantea un personaje interior obsesionado por el trabajo más que un prototipo de empresario con ganas de hacerse rico.

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  8. Estoy segura de que la actitud de Steve Jobs a la hora de tratar a sus empleados y a sus productos hubiese sido diferente sin la presión y la incomodidad de tener detrás a un virtuoso de los negocios, capaz de adelantar e intimidar a quien se proponga.
    Su interés por ser el mejor, el único, el líder de una gran familia, son algunos de los objetivos que ve peligrar con Bill Gates ``pisando sus talones´´. Jobs pasa de ser una persona pacífica y con una filosofía de vida un tanto hippie, a ser en un máquina de creaciones, insaciable e inconformista.
    Sin duda cabe, que los productos de Apple son exclusivos, en su mayoría pioneros y de la mayor calidad tecnología del mercado. Con el afán de ser los mejores y no ser superados, Stef y su equipo, han logrado posicionarse como los genios de la tecnología, pero...¿ha sido caro llegar hasta ahí?

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  9. Pensaba igual que vos, Rafa. Pero leyendo la noticia sobre los suicidios y, especialmente, reflejo de esa inconsecuencia en sus actos me hace dudar. Quizás aventuré mucho al afirmar que su fin era el poder (por tanto, el dinero) pero no entiendo esa enemistad enfermiza con Gates o no querer admitir que tiene una hija. Posiblemente sea una incapacidad mía la de no poder separar, "ser el número uno" con "la búsqueda del poder", simplemente creo que son la misma meta y que todo se disfraza y se le da otro nombre.

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  10. "... a ser en un máquina de creaciones, insaciable e inconformista." --> totalmente de acuerdo Esther!

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  11. Me quedo con la versión de Jobs como un genio, queriendo alcanzar su sueño de la perfección, de superar a las grandes empresas, sobre todo IBM. Por otro lado como comentáis, está la "cara B" presente en todas las grandes empresas, como ha alcanzado el sueño de situar la empresa que fundó a un nivel de competitividad, realización de productos, acabados, e incluso de lujo (poseer un producto Apple durante muchos años era estar por encima del resto) mediante métodos poco correctos.

    De lo que no hay duda, es de su capacidad de seguir creando productos innovadores (hasta su muerte), siendo las demás empresas quienes han acabado copiando varios de sus productos. Ironías del destino.

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  12. Yo me considero admiradora absoluta de Steve Jobs. Todo genio tiene sus locuras, estoy deacuerdo en que no trataba excesivamente bien a sus empleados e incluso los explotaba con esas famosas 90 horas a la semana del equipo de Macintosh, pero también es verdad que los empleados alardeaban de ello y no parece que se quejaran demasiado (como se ve en la película), sino que parecían orgullosos de formar parte de ese equipo y lucían sus camisetas con cierto orgullo.
    Por otro lado, descrubrí al real Jobs al ver el discurso que dio en la Universidad de Standford en 2005, como ya decía Lucía. Un discurso realmente motivador para todo el mundo, el cuál me ha ayudado personalmente muchísimo.

    Un genio nato "ese tal" Steve Jobs!

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    1. La genialidad no debería estar reñida con la humanidad.
      En el mundo en el que vivimos se vende todo, y alcanzar las más altas cotas de mercado son el único objetivo empresarial. En esto Jobs si fue un genio. Un genial capitalista, capaz de venderlo todo por su ego personal, por la competitividad, por el crecimiento desmesurado de su empresa, que le diese el reconocimiento mundial. Sin embargo, humanamente fue un necio. Un necio que no fue capaz ni si quiera de ser fiel a si mismo. Abandonó sus propios principios de juventud, su pareja, su hija, por el cumplimiento del sueño económico. Maltrató a sus empleados, que también se rebelaron. En la película hay uno que incluso le agrede, en respuesta a la agresión constante que representaba su despotismo.
      Quizá el verdadero problema social radique aquí. En la incapacidad de relacionar el poder con valores sumamente más importantes, como son la humildad, la integridad o la humanidad. Vivimos inmersos en un mundo en el que el poder es dinero, y no tanto genialidad.
      Alabemos pues su capacidad y visión empresarial y que sea alabado por los genios de la economía, despreciemos pues su personalidad, porque no es más que el modelo de persona que destruye a los que tiene a su alrededor.

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    2. Me encanta lo que dices Miguel Ángel :) No lo pude expresar mejor, pero esa era mi idea desde el principio. Es cierto que muchas veces no conviene separar al artista de su "arte" pero hay veces que tenemos que accionar el pedal de freno y replantear nuestros propios ideales y qué dejamos pasar.
      Podría compararse esto con personajes como Faruquito o Maradona, si bien su "arte", aquello que se les daba tan bien, se vio nublado y corrompido por unas acciones que socialmente repudiamos ¿Por qué con Jobs no nos asutamos? Seguimos comprando sus productos, idolatrándolo y creyendo esas historias de que es un Gandhi.
      Si su camino al éxito es ser inhumano, entonces el problema es nuestro y no suyo.

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